El mundo del hielo está lleno de curiosidades y de beneficios que la mayoría de gente sigue sin conocer. Es por eso que a través de este blog de «Ice For Life», pretendemos ir dando pistas y revelando todo lo que hasta ahora, quizá, no sabías.
Y es que, si en algo somos expertos, es en conocer cada uno de los secretos que se esconden detrás de un cubito de hielo. Hasta ahora, probablemente sabrías que el hielo es ‘solo’ un estado natural del agua (congelada y en estado sólido). También que es muy frío y que tiene un color entre blanco y traslucido. Pero… ¿Creías que alcanzaba este estado a una temperatura de 0 °C? Pues ese es uno de los primeros errores.
En este breve y divertido post podrás conocer algunas de las muchas curiosidades sobre el hielo que quizá no conocías hasta ahora y que, desde luego, son más que interesantes.
1- El agua fría no se congela antes que la caliente
De hecho, como os hemos avanzado en la introducción, el agua ni siquiera se congela a 0ºC. Ni la del mar ni el agua pura. Para que el agua se congele, es necesario que sus moléculas puedan agarrarse a algo. Los cristales de hielo se forman alrededor de núcleos, como pequeñas partículas de polvo. Si no las hay, la temperatura debe bajar entonces hasta -42 ºC para que se congele. En el caso del agua del mar, por su alto contenido en sal, la temperatura normalmente puede descender por debajo de los 0º C sin que se congele.
Pero volviendo al tema principal, tiene cierta lógica pensar que el agua fría se congela antes que la caliente: será más lento congelar agua que está caliente, porque primero debemos enfriarla. Pero es justo al revés: el agua caliente se congela antes que el agua fría. El primero que se dio cuenta de este hecho fue Aristóteles, pero la ciencia no lo aceptó hasta 1963, llamándose efecto Mpemba, en honor a Erasto Mpemba, un niño de una escuela de Tanzania que lo demostró repetidamente en su clase con helados.
Para que se cumpla este efecto, el agua debe encontrarse al menos a 30º C de diferencia entre las temperaturas de ambos cuerpos, pues la cantidad de calor que se transfiere por unidad de tiempo es proporcional a la diferencia de temperaturas de los dos cuerpos. Por ello, si arrojamos agua al aire a 80º cuando se está a -10º, el agua se congelará más rápido que si la arrojamos a 15º.
2- Existen diferentes tipos de hielo
Quizá este es uno de los secretos que mejor deberíais conocer. Más que nada porque ya os hicimos un post hace unas semanas hablando sobre todos los tipos de hielo de ITV Ice Makers. En total son más de 10 los tipos de hielo que existen con diferentes propiedades conocidas por la ciencia y cada uno de ellos está destinado a diferentes usos específicos de los que ya os hablamos.
3- El hielo de los glaciares es fundamental para la vida
Este es uno de los puntos más fundamentales alrededor del hielo. Y es que cerca del 10% de la Tierra está cubierta por glaciares, éstos están hechos de hielo (que en esencia es agua) y son primordiales para la existencia de nuestra especie. Además, 3/4 partes del agua dulce del planeta está contenida en esos glaciares, por lo que es fácil imaginar que si los polos se derritieran, estaríamos varios metros bajo el agua.
4- El hielo es un indicador de vida extraterrestre
El universo más allá de la Tierra es un misterio absoluto. Saber si hay vida en otros planetas se antoja complicado, pero para saberlo, el primer paso siempre será encontrar hielo. Y es que es un indicador de vida extraterrestre, ya que contiene un montón de hidrógeno y oxígeno comprimido de diversas maneras. Estos 2 elementos son de los básicos para que exista la vida. De hecho, el universo está repleto de oxígeno e hidrógeno y es altamente aceptado en la comunidad científica la teoría que afirma que el agua de la Tierra vino en cometas y asteroides con hielo que golpearon el planeta hace mucho tiempo.
Además, la vida en ambientes tan complicados como el hielo es difícil pero se conocen numerosas especies capaces de subsistir, por ejemplo, en lo más profundo del hielo de la Antártida, en forma de organismos microscópicos, pero vivos al fin y al cabo.
5- Tiene múltiples beneficios para la belleza
Este es otro de los asuntos que ya tratamos en el blog «Ice For Life». Y es que, entre otras cosas, gracias al hielo puedes beneficiarte de todo esto que ya os contamos en su día:
1- Le devuelve su luminosidad: Ayuda a mejorar la circulación, disminuir la aparición de arrugas, alivia el dolor y el enrojecimiento causado por el acné, reduce las ojeras y la hinchazón.
2- Maquillaje ideal: Además, aplicando el hielo para rejuvencer tu rostro antes del maquillaje, verás cómo se fija mucho mejor a tu piel. Asimismo el hielo cierra los poros y evita la oleosidad de la piel, logrando afinar la textura del cutis y disminuir la cantidad de secreciones sebáceas, lo que hace más duradero nuestro maquillaje.
3- Al depilarse: También es recomendable antes de depilarse darse una ducha de agua fría o aplicar sobre la zona depilada cubitos de hielo, de este modo calmarás la irritación de la piel y al mismo tiempo se cerrarán los poros, haciendo que la piel luzca más fresca.
4- Calmante para pieles con acné: Las espinillas además de representar un riesgo para la salud de tu piel, perjudican a la belleza del rostro. Mantener el hielo sobre una espinilla es una manera fácil de aliviar la molestia y evitar el enrojecimiento típico de esta afección cutánea. A su vez, reduce la inflamación y el dolor.
5- Aclara las ojeras: Cuando hayas tenido una noche difícil de mucho trabajo y levantas con el rostro cansado, puedes envolver cubitos en un paño y mantenerlo sobre los ojos, a fin de reducir la hinchazón.